Estanterías a la vista en la cocina

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Lo que son las modas, hemos pasado de tener unas cocinas impolutas y minimalistas con casi nada a la vista y todo bien guardado, a combinar la cocina con el concepto de estanterías a la vista o abiertas, más habitual en las despensas.

Las estanterías a la vista son cómodas, económicas y tienen la gran ventaja de que puedes hacer composiciones con tus piezas de cerámica favoritas, o tarros con los que usas a diario y tener todo a mano.

Hoy en día ni siquiera tienes que salir de casa para encontrar todo lo que necesites para colocar estanterías en tu cocina ya que en webs como Lionshome, encontrarás estanterías, anclajes y todo lo que quieras para llenarlas, desde tarros de cristal y especieros a tazas de porcelana de mil colores.

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Las estanterías a la vista rompen la linealidad de la cocina, aportándole un toque de espontaneidad y personalidad.

Los muebles de cocina altos crean una sensación de espacio más lleno, mientras que las estanterías aligeran y dan aire. Es una buena forma de aportar un poco de personalidad a una cocina, porque no va a existir ninguna igual y podrás tener a la vista colocados objetos que difícilmente se parecerán a los que existan en otras cocinas. Las piezas seleccionadas para colgar van a cambiar la rutina de color y diseño del resto de mobiliario, además de ser una opción cómoda y de plena actualidad.

Quizá no os entusiasme la idea de dejar a la vista los anclajes de las estanterías, pero hay infinidad de opciones, algunas con un aspecto que, además de permitir que las estanterías aguanten el mismo peso que un armario, quedan muy atractivas a la vista. E incluso podemos añadir colgadores para las tazas más bonitas.

En la película de Anne Hathaway y Robert De Niro The Intern (El Becario), la cocina tenía una estanterías perfectas para ilustrar este post.

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Como veréis combinando estilos pero con encanto, las estanterías con anclajes de hierro negro, madera y colocadas ante ese azulejo tipo «metro», que está muy de moda pero no cansa. Elegante pero nada seria, muy acogedora con un estilismo perfecto.

Las combinaciones son infinitas, podemos poner estanterías del mismo tono que el resto de muebles o darle un toque a la cocina cambiando el material. Como veis en las fotos funciona muy bien la combinación del blanco y gris con madera.

Sin decides pintarlas del mismo tono que el fondo estarás rebajando su peso visual y, al contrario, si las pones en un tono que contraste con el fondo, les estarás dando más protagonismo.

Es importante resaltar que el tener las estanterías vista, aunque sea más cómodo, no nos exime de ordenar cuidadosamente lo que vamos a colocar sobre ellas. Vamos, que por el hecho de tenerlas a mano al final no se conviertan en ese espacio donde cabe todo sin más. El orden y la limpieza son importantes.

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Y hablando de la limpieza, es inevitable que, estando tantas cosas expuestas en la cocina, saquemos a colación el tema de la suciedad, pero como todo, las cocinas bien cuidadas y con un mantenimiento ligero no llegan a llenarse de una suciedad de anuncio (de spray en mano con grasas que parecen de camión)

La grasa sabemos que se cuela en el ambiente (sobretodo si sueles cocinar mucho frito), pero si tenemos una cocina bien diseñada, con una potente campana extractora y una buena aireación y somos cuidadosos, es complicado que todo llegue a ensuciarse como para arrepentirnos de haber colocado una estantería vista.

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Si tenéis intención de renovar la cocina, si habéis pensado darle un toque más actual, quizá sea el momento de plantearse poner estanterías a la vista.

En mi caso, con esa afición mía por las latas y por los tés, creo que la llenaría rápido.